domingo, 30 de noviembre de 2008

Mis zapatillas a cuadritos

Las calles del barrio eran de tierra con surcos marcados por los piés de su gente; gente humilde y de trabajo, de lucha, pero felices.
Recuerdo mi camino a la escuela, todo potrero y alambradas, pastos húmedos con las gotas del rocío, que calentaba el sol de la mañana.
Recuerdo que llegabamos al colegio y yo con mis zapatillitas mojadas. Los cuadraditos de su tela brillaban como los zapatitos de la cenicienta, pero, claro, mojadas daba mucho frío. Pero igual marchábamos hacia el saber, hacia esa meta de aprender, no importaba que uno carecía de libros o cuadernos, lo importante era llegar y saludar a nuestra enseña patria, que tanto nos enseñaban a respetar y a amar.
Luego el aula, ¡Qué hermosa era mi aula!, era de madera, pintada de beige clarito. Como amábamos esos pupitres viejos marcados por tantos y tantos niños que pasaron por esas aulas. Tal vez alguno se le cumplió la ilusión de llegar a su meta.
¡Qué suerte!, yo en cambio, quedé en el camino añorando un delantal blanco de maestra y enseñar y enseñar...
Y bueno, no pudo ser...
Me quedé como siempre con un montón de sueños rotos, con mis ansias cortadas como con una sierra de estas modernas. Vieron, cómo tala?, así quedé yo.
Como ese arbol que podía dar los más importantes frutos, pero lo talaron. A nadie le importó que una niña hecha mujer viera su ilusión partida en dos. Nadie, nadie se dió cuenta por qué, por qué tanta injusticia y hoy lo tienen todo y son pobres, pobres de alma. Sin vida, sin color como mis zapatillas a cuadritos mojadas con el rocío.

Bueno, Mami.. aquí estoy yo con mi guardapolvo blanco de maestra y mientras estuvimos juntas compartimos la felicidad , el orgullo y la satisfacción de enseñar... Te quiero mucho, lo sabés...

domingo, 16 de noviembre de 2008

El traje rosado

Un carruaje negro
llevaba la novia
de rosado color.
Tan distinta a todas
viajaba la novia
que no parecía
sonreirle el amor.

¡ Qué es lo que le pasa
a la hermosa novia
que el rosa perlado
de sus labios cambió,
por un oscuro morado
que producía dolor!

Es que la novia
ya no era novia,
y que su rosado traje
no era para ir ante Dios.

Esta vez lo haría sola,
envuelta en su traje rosado
prueba de su gran amor,
es que su cuerpo solo estaba
porque su alma había volado
hacia Dios...

Otro poema de mi mami... Lo quería compartir porque este era uno de los que más le gustaban a ella